Palabra Última
Era 1999 y el mundo parecía al borde de un colapso. Las noticias anunciaban que las computadoras dejarían de funcionar, que el planeta se desconectaría, que el año 2000 traería un desorden global. En medio de esas voces apocalípticas, Nicolás Buenaventura decidió buscar los verdaderos relatos del fin del mundo y emprendió un viaje al Amazonas: “Yo había hecho un espectáculo que se llamaba Mitos de creación y pensé en hacer su contraparte: los mitos del fin del mundo”, nos cuenta Nicolás.
De esa exploración —que lo llevó a esta región de selva y río pero también de historias no siempre contadas por palabras, una combinación de cotidianidades, rituales, fiestas tradicionales, y mucha escucha al entorno y a varias conversaciones con músicos, pintores y sabedores— nació Palabra Última un libro que más de dos décadas después llega a la colección Leer es mi cuento, con ilustraciones de Valentina Toro.
“Nos fuimos a buscar relatos del fin del mundo”, cuenta Buenaventura. “En el Amazonas no encontramos tantos relatos apocalípticos, sino otras señales: la contaminación en los ríos, los parlantes que sustituían los cantos, y un hombre que me dijo que no podía contar cuentos porque había olvidado su lengua. Y sin lengua no se puede contar historias. Cuando una lengua se pierde, mueren muchas historias”.
Los mitos que reunió en ese tiempo primero se transformaron en un concierto ilustrado con Antonio Arnedo, César López y la escenógrafa Maybe Ríos, donde música, pintura y narración se mezclaban. Luego, los cuentos quedaron con él, esperando su forma definitiva.
“Cuando terminó este viaje, los cuentos siguieron conmigo —dice—. Los fui escribiendo y reescribiendo. Hablan de la muerte, pero sobre todo de la vida. A mí no me interesa la muerte, me interesa la vida; y creo que la muerte es una manera de hablar de la vida, de verla como algo precioso, como un milagro”.
El encuentro con Valentina Toro
En Palabra última, las palabras de Nicolás se encuentran con las imágenes de Valentina Toro, ilustradora. Ella logró que las imágenes tomaran esa atmósfera sombría y al mismo tiempo llena de luz. Para Nicolás es otro renacer de estas historias: “Es como si los cuentos nacieran de lo que ella dibujó”. Los personajes que pintó están dentro y fuera de las historias al mismo tiempo. Es un trabajo maravilloso”. comenta.
El resultado es un libro en el que palabra e imagen dialogan desde la emoción y el misterio, construyendo un universo en el que los ríos, los mares y los árboles cobran voz propia.
El derecho a la complejidad
Aunque para muchos la muerte debería ocultarse de cierta forma a los niños, Nicolás invita a abrazarla en cotidianidad y en las experiencias de la vida que no podía estar desligada de esa muerte, una que se comprende en medio de todos los días donde un árbol muere y otro renace o un insecto es comido por un sapo.
“Creo que en los derechos culturales de niñas y niños debe estar el derecho a la complejidad. El derecho a la seriedad, a la profundidad. No debemos pensar que no pueden entender o sentir lo complejo. Ellos también tienen derecho a enfrentarse con los grandes temas: la muerte, el paso del tiempo, el fin del mundo”.
Para él, lo importante no es protegerlos del miedo, sino acompañarlos en la búsqueda de sentido. “No sé si podamos evitar las pesadillas —dice sonriendo—. Tal vez se trata de aprender a caminar en la oscuridad, de encontrar la manera de salir de ellas”.
“Las niñas y los niños necesitan muchos cuentos para crecer, no solo los luminosos: también los oscuros, los difíciles, los que enseñan a caminar por otros territorios de la vida”.
Un universo vivo
Palabra última reúne relatos donde el mar es un niño travieso, la tejedora es mitad humana y mitad animal, y el movimiento mismo se convierte en personaje. Son mitos y poemas a la vez, historias que borran las fronteras entre la vida y la muerte, entre el principio y el fin.
“Lo importante no es empezar ni terminar —dice Nicolás—, sino volver. Volver a nacer, caer y levantarse, seguir caminando”.
Palabra Última, de Nicolás Buenaventura con ilustraciones de Valentina Toro, hace parte de la colección Leer es mi cuento del Ministerio de las Culturas, las Artes y los Saberes.
El libro estará disponible en las bibliotecas públicas del país y para leer en línea y descargar en https://maguare.gov.co/palabra-ultima/
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