Desde la entrada de la Biblioteca Jorge Enrique Hernández Carrillo del municipio de Subachoque, en Cundinamarca, un lugar especial ubicado en el segundo piso llama la atención de los visitantes. A través de la ventana se ve un árbol de ramas largas, algunos papeles translúcidos de colores y un grupo de niños que juegan, ríen y cantan frente a los computadores que allí se encuentran. Ese lugar es la Sala Maguaré, un espacio creado, adecuado y decorado por el personal y los amigos de la biblioteca.
Tras una visita del promotor de lectura Jhon Galindo, de la Biblioteca Nacional, quien les mostró todas las actividades y recursos disponibles en el portal Maguaré, Maritza Nova y Alexander Rodríguez decidieron que los niños de su municipio merecían tener un lugar único en la biblioteca. Así, se pusieron manos a la obra y le dieron vida al personaje de Álex, el anfitrión de la Sala Maguaré, quien tiene la misión de guiar a los visitantes en la fascinante aventura de descubrir todo lo que el mundo de Saimiri tiene para ellos.