Carlos Millán y Maritza Sánchez son los creadores de Kikirikí, El show de Perico, El mundo animal de Max Rodríguez, Asquerosamente rico y, recientemente, de Maguaré en La Ceiba. Los dos, a pesar, de ser como el agua y el aceite, distintos y antagónicos, son ejemplo del trabajo en equipo; como ellos mismos lo confiesan, coinciden en gran manera cuando se trata de crear personajes, universos e historias para los niños, sin embargo el proceso no es fácil: “Somos unos pelietas”.
Los dos se conocieron hace unos 20 años en una productora llamada Video Móvil en la que Carlos hacía sus primeros pinitos como director y Maritza era la asistente de dirección. Por allá en 1999, Carlos decidió viajar a España para realizar estudios en dirección y a distancia empezó a trabajar con Maritza en el desarrollo de nuevas ideas y formatos para televisión. Fue así como empezaron a trabajar en una serie llamada Kikirikí el notizín, el cual se convirtió en el primer programa que produjeron juntos y que se emitió en televisión.
Después de Kikirikí el notizín continuaron generando ideas desde la distancia. En 2007 se les ocurrió hacer un talk show de animales llamado El show de Perico, un espacio para salir del cascarón, un programa presentado por Perico, un huevo que le tiene miedo a salir del cascarón, y por Amanda, una tapir que el público y los invitados siempre confunden con un animal diferente; en cada episodio aparece un invitado que cuenta un problema o conflicto, y Perico, Amanda y el público tratan de encontrar una solución.
Pasaron un par de años para que El show de Perico saliera de la incubadora. Señal Colombia, en 2009, abrió una licitación en la que había lugar para la propuesta y, claro, ganaron. De este programa salieron tres temporadas.
Paralelo a la producción de El show de Perico, Maritza y Carlos desarrollaron con su productora Tribu 70 una serie titulada El mundo animal de Max Rodríguez, que narra la historia de Max, un turista con espíritu de explorador que siempre quiere imitar a sus héroes de la televisión; para producirla decidieron hacer una coproducción con Ecuador TV, Señal Colombia y Paca Paca de Argentina. Al programa le fue tan bien que se transmitió en México, Panamá, Colombia y Argentina, y además fue premiada en los Premios India Catalina, en la categoría infantil, y en el Festival comKids, en la categoría de ficción.
Este éxito, sin embargo, fue una experiencia agridulce por los riesgos económicos que conlleva este tipo de producciones. Así, mientras El mundo animal de Max Rodríguez seguía teniendo gran acogida, Maritza y Carlos volvieron al punto inicial: poco dinero, solo ellos dos y un cúmulo de ideas por trabajar y producir.
La invitación consistía en desarrollar una serie de 13 capítulos en 6 meses, y, aunque su idea en principio resultaba muy costosa por tratarse de una mezcla entre personajes reales y animados, estaban convencidos de hacerla. Fue así como como ganaron y con el dinero produjeron la primera temporada. Posteriormente se presentaron al mercado de coproducción, una de las diferentes modalidades que tiene Señal Colombia para financiar contenidos con productores nacionales e internacionales, y continuaron las siguientes temporadas. Hoy por hoy Asquerosamente rico está próxima a presentar su quinta temporada y cuenta con una nominación a los International Emmy Kids Awards.
“Ha sido todo un camino de crecimiento, de caernos y volver a empezar; siempre desde lo básico. Lo más valioso son las ideas, la capacidad de desarrollarlas, de presentarlas y meterle mucha gracia a hacer contenidos divertidos… En eso Carlos y yo coincidimos… en todo lo demás no”, comenta Maritza y después suelta una risa sutil.
Una pareja des-igual
Carlos y Maritza tienen muchas ideas afines, pero personalidades opuestas. Mientras que Maritza es más de detalles, Carlos tiene una visión más general de los proyectos. Los personajes de cada una de sus creaciones son el resultados de esa mezcla: los dos encontraron en las diferencias posibilidades de generar universos y proyectos enriquecidos por sus particularidades.
Como dice Maritza, su trabajo con Carlos es como cualquier relación afectiva con su altas y sus bajas: se han dejado de hablar por temporadas y cuando se ven siempre discuten por el bien de los contenidos infantiles. A pesar de eso los dos confían el uno del otro:
Para los dos el sentido del humor es un elemento de encuentro: en sus producciones el humor se construye a partir de anécdotas, situaciones hipotéticas y voces que parecen salir de una fábrica de personajes.
“Que seamos tan distintos hace que los contenidos sean más ricos. En la discusión, los desencuentros y los obstáculos resultan productos más interesantes. Si alguien siempre te lleva la idea o te venera no tiene mucho sentido. Vender la idea a alguien distinto a uno significa esforzarse más”, dice Carlos.
Para desarrollar una idea se necesitan distintas visiones acerca de lo mismo, eso enriquece la narrativa de lo que se está pensando; cuando es una sola persona que está haciendo un contenido la visión puede ser muy limitada. Por eso el trabajo de Carlos y Maritza es una construcción colectiva: Carlos tiene una forma de hacer las cosas, las cuenta de una manera –desde su seriedad–, así como Maritza lo hace desde su espontaneidad. Cada uno, a su manera, aporta al desarrollo de cada contenido.
“Si los contenidos salieran de una sola cabeza, no sería tan rico… Juntos logramos hacer contenidos que se vuelven familiares aunque estén dirigidos a una audiencia en particular. Los papás se pueden sentar a ver y se pueden divertir igual”, cuenta Maritza.
Las creaciones de Carlos y Maritza no excluyen a la familia ni están enfocados solo en el chiste infantil; la riqueza de lenguaje, el humor y los guiños de cada producción permiten que un adulto y un niño se sienten y se diviertan igual.
Lo principal, como dice Carlos, es que cualquier historia, al margen de que sea infantil o no, surja de los personajes: que sean fuertes, divertidos y sólidos:
Esa misma naturaleza está, en parte, en las ideas de Carlos y Maritza: nacen en total libertad, sin rigidez, y luego, entre los dos, entre una «pelea» y otra, las llenan de humor, de grandes personajes y mucho amor y respeto por la los niños.
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hola. Soy una persona que hace ya unos añitos…. deje la niñez pero desde que presentaron el show del perico me declaro una fan. hoy 23 de nov 2019 repitieron un capitulo y vuelvo a decir que excelente programa me rio como loca. Ojalá le pudiera llegar este mensaje a Carlos Millán y su equipo. Definitivamente es otro nivel.
Muchas gracias por hacer parte de la familia de Maguaré y MaguaRed. Nos alegra que las publicaciones que sugerimos sean de tu interés. No dejes de visitar http://www.maguared.gov.co y http://www.maguare.gov.co con tus niños.