El desarrollo humano en la sociedad debe crear condiciones en las cuales las personas, tanto individual como colectivamente, logran el abastecimiento de todos los elementos materiales vitales: salud, alimentación, hogar, educación, cuidado y, claro, cultura. En ese margen, en ese propósito de desarrollo humano, una de las etapas más importantes y vitales –sin querer ser repetitivos– es la primera infancia: de 0 a 5 años.
Lo anterior es el centro y el punto de partida de la investigación Infantia. Prácticas de cuidado en la primera infancia, desarrollado por investigadores de la Universidad del Norte y ganadora del Premio Marta Arango Montoya a la Investigación en la Primera Infancia.
Esta investigación recoge y analiza, a lo largo de sus tres capítulos, las prácticas de cuidado de las familias del sur del Atlántico y propone estrategias de intervención basadas en las tecnologías de la información y la comunicación (TIC) para crear impactos positivos en la la infancia; lo anterior con base en el cuidado y la perspectiva de los derechos de los niños. En ese sentido, los investigadores abordan el tema a través de un enfoque multidimensional –integral–, que une todos los conjuntos sociales –vida privada (familia), vida pública (escuela, comunidad, pares) y vida íntima (sentimientos y pensamientos), para una respuesta efectiva. Esta perspectiva permite ampliar el rango de acción e implementar una estrategia de prácticas que vincula a todos los actores y sectores de la sociedad –no solo la familia: esa idea, precisamente, es el punto de partida de la Estrategia Nacional de Atención Integral de la Primera Infancia, De Cero a Siempre.
«El presente proyecto pretende unir esfuerzos con otras instituciones con el fin de generar conocimiento científico que aporte herramientas y estrategias de impacto para la protección de la infancia», dice uno de los apartes del texto.
Y aunque los resultados cualitativos y cuantitativos de la investigación se enfocan en las prácticas del cuidado en la zona sur del Atlántico, su análisis es valioso porque permite contrastar y aplicar alternativas para la implementación de estrategias integrales en pro del cuidado de la primera infancia.