En una casa de madera ubicada en las afueras de la ciudad de Bogotá, rodeada de naturaleza y de objetos en cerámica moldeados por sus manos, la artista Olga Lucía García crea imágenes para libros, cartillas, páginas web y cajas para postres. Ella es la ilustradora de Ábrete grano pequeño, el tomo de adivinanzas de la colección Leer es mi cuento, escrito por Horacio Benavides.
Olga Lucía tiene una voz dulce y una sensibilidad propia de aquellos que ven el mundo a través de los ojos del arte. Es artista plástica de la Universidad Nacional de Colombia y la única entre sus tres hermanos que se dedica a este oficio. Dibujar era uno de sus juegos favoritos cuando era pequeña, lo hacía al lado de su madre a quien también le gustaba intervenir cualquier papel.
“En una navidad pedí unos marcadores de colores para utilizar en mi libreta, en la cual mi mamá y yo dibujábamos todo. También hacíamos muñequitas de papel recortadas y les creábamos vestidos en papel, hacíamos casitas, les abríamos las ventanas y les metíamos cositas adentro, todo jugando con el dibujo. Con mi hermana, ese era uno de nuestros juegos favoritos. Uno dibujando podía inventarse todos los vestidos del mundo”, recuerda la artista bogotana.
Cuando Olga va a dar vida a una nueva ilustración empieza por hacer bocetos y anotaciones en su libreta, y a diseñar espacios de manera esquemática. Luego escanea estos dibujos y en su computador explora las opciones de trazo y de efectos que le ofrece el programa de edición de imagen que utiliza: “El computador me da muchas posibilidades y puedo hacerlas de manera rápida, me permite hacer cosas que a mano se demoran mucho, sin embargo, me gusta mucho la línea un poco burda que da el lápiz”.
Sus materiales preferidos para dibujar son la tinta china y los lápices y bolígrafos de colores. Cuando se le pregunta hace cuánto empezó a ilustrar, responde entre risas: “Yo me gradué de la universidad en 1992, así que dejémoslo en que empecé desde el siglo pasado”. Su primer contacto con la literatura infantil ocurrió cuando trabajaba en una editorial y le encargaron crear una secuencia de imágenes para el poema A Margarita Debayle, de Rubén Darío.
A propósito del libro de adivinanzas, Olga Lucía comenta: “Este libro me gusta mucho porque es una invitación a jugar no solo con el significado de las cosas sino también con la palabra misma, con las rimas. Uno puede interpretar la respuesta solo con el juego musical. Mi reto era ilustrarlo sin ser muy obvia con las pistas y a la vez pensar en color, en hacer páginas cálidas que se alternaran con las frías para que fuera armónico”, comenta la artista, quien participó también en el libro De animales y de niños, el volumen 7 de la colección Leer es mi cuento.
La ilustración y la cerámica
Las hojas de las libretas de Olga Lucía se alternan entre la cerámica y la ilustración: “Me gusta mucho planear lo que voy a hacer, por eso hay bocetos de lámparas, de torneados, de vasijas. Cuando nació mi hijo Nicolás hice varios dibujos del él chiquito jugando con el perro, porque se lanzaba a cogerle las orejas a cualquier perro que veía”, cuenta la artista.
La trayectoria de Olga Lucía García en el campo de la ilustración abarca también proyectos con la Biblioteca Nacional de Colombia, la campaña Libro al viento, del Instituto Distrital de las Artes, la colección Leer es mi cuento, del Ministerio de Cultura, las cartillas para el Instituto Humboldt, el diseño de carátulas para editoriales y revistas, entre otros. Así mismo, ha trabajado alrededor de 15 años en el diseño de colecciones, cajas, etiquetas, empaques y tipografías para Cascabel, la empresa colombiana de repostería y pastelería.
Como ceramista, ha realizado talleres para niños de modelado y trabajo con el barro y actualmente es profesora en la Universidad de los Andes de técnicas básicas de cerámica y cerámica torno.
Preciosas tus pinturas alegran el alma y recrean el espiritu
Siempre vi el libro leccion de los olvidados en el estante de mi cuarto, no sabía como pero esa portada me hacía querer leer el libro. Qué bonito trabajo y sobre todo motivador, ya que tambien me gusta dibujar pero solo quedo en bocetos. Gracias por dedicarle un espacio a quien me motivó a leer nuevamente
¡Genial, Carola! No pares de leer y dibujar 🙂 Un gran saludo.